¿En qué consiste el blanqueamiento dental?
Todos queremos una sonrisa blanca y brillante. Por ello, no es de extrañar que el blanqueamiento dental sea uno de los tratamientos odontológicos más demandados.
Pero, ¿Sabemos qué es? ¿Cómo se hace? ¿Todos podemos realizarnos? ¿Qué peligros evitar o qué cuidados debemos de tener? Descubre en qué consiste el blanqueamiento dental
El color de nuestros dientes viene determinado, desde que nacemos, por la tonalidad del núcleo del diente (dentina) y por la transparencia y capacidad de refracción de la luz por el esmalte. El color del núcleo no se altera, sin embargo, con el tiempo el esmalte se va oscureciendo. Depende de nuestros hábitos y genética que el color amarillento o las manchas aparezcan antes.
Como por ejemplo, el tabaco, el consumo excesivo de bebidas como el café o alimentos con altos niveles de colorantes propiciarán que nuestros dientes se tiñen. Con el blanqueamiento dental conseguimos eliminar del esmalte, por medio de sustancias químicas, todas aquellas partículas que alteran su color original.
¿Qué es un blanqueamiento dental?
El blanqueamiento dental es un proceso que consigue aclarar varios tonos el color natural de las piezas. Sin embargo no se puede escoger el tono de blanco como si escogieramos el color de un jersey. Debemos tener en cuenta que cada dentadura responde de una forma y además, hay múltiples factores que influyen en el color obtenido.
Dicho esto, lo que sí que se puede asegurar es que tras el tratamiento, siempre conseguirás unos dientes más blancos. Después de un blanqueamiento en una clínica dental podrás apreciar a simple vista como tus dientes lucen más blancos y brillantes.
¿En qué consiste el blanqueamiento dental?
Para conseguir una sonrisa más blanca en Odontología se emplean dos sustancias: el peróxido de hidrógeno y el peróxido de carbamida. La principal diferencia entre estas substancias es que el peróxido de hidrógeno empieza a tener acción sobre los dientes al cabo de entre 30 y 60 minutos. Y la carbamida tarda entre dos y cuatro horas en hacer efecto.
A partir de este tiempo, lo que se consigue es abrir los poros dentales para penetrar en sus capas internas y comenzar la acción blanqueadora.
¿Qué debo saber antes de realizarme un blanqueamiento dental?
Existen diferentes tipos de blanqueamientos dentales: Tratamiento en la clínica, tratamiento en casa o combinación de ambos.
Aclarar el tono de la sonrisa de forma permanente, segura y eficaz a largo plazo únicamente se consigue a través de la supervisión de un especialista y con los productos adecuados. Es muy importante recordar que un blanqueamiento dental no es meramente un tratamiento estético.
Antes de realizar cualquier tratamiento blanqueante es primordial un diagnóstico previo. Con ello certificamos que el paciente tiene una buena salud bucodental. En los últimos años, han aparecido muchos tratamientos caseros, o tratamientos blanqueantes realizados fuera de clínicas dentales. Al emplear productos químicos es de vital importancia garantizar la eficacia del tratamiento. Siempre se ha de realizar bajo supervisión de un dentista colegiado y con experiencia. De este modo, no dañaremos nuestra salud.
Un blanqueamiento dental es 100% seguro si se realiza en una clínica odontológica. No es doloroso, ni daña el esmalte. Aunque en algunos casos sí puede provocar sensibilidad dental. De todos modos, la sensibilidad irá desapareciendo en las 72 horas posteriores al tratamiento. Para minimizar esta posible consecuencia se pueden usar pastas dentífricas o colutorios para combatir la sensibilidad.
¿Cuánto dura el tratamiento?
La durabilidad del tratamiento depende en gran medida de los hábitos del paciente.
En primer lugar, justo después del tratamiento es importante realizar una ‘dieta blanca’ durante unos 10-15 días, incluso hasta un mes. Esto significa evitar alimentos y bebidas con muchos pigmentos o colorantes como el tomate, la zanahoria, los frutos rojos, las salsas, el chocolate, el vinagre balsámico, el vino tinto, el té, el café o las bebidas carbonatadas tipo cola. Además, para garantizar la eficacia total del tratamiento tampoco se debe fumar durante este periodo.
Transcurrido este primer mes, es importante no descuidar la higiene bucodental. Y evitar al máximo el tabaco y los alimentos que puedan teñir los dientes. En caso que no se pueda evitar su ingesta será aún más importante la higiene bucodental.
Así pues, en una persona fumadora, que bebe vino y toma café regularmente, el efecto del blanqueamiento se perderá con más rapidez.
En muchos casos se recomienda un mantenimiento periódico con férulas y algunos colutorios o pastas dentífricas. Te ayudarán a prolongar la acción blanqueadora. Con buenos hábitos y visitas periódicas al dentista un blanqueamiento profesional puede incluso ser permanente.
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